Según la cosmogonía china, al final de cada estación se lo considera como la quinta estación. Si bien no existen fechas fijas, sino que hay que detectar si una estación se hace sentir antes o después, las transiciones que más se deben respetar son las de los equinoccios de otoño y primavera, cuando el universo cambia de la fase yin a la yang y viceversa. (Tanto la primavera como el verano son distintos niveles de yang y el otoño con el invierno son distintos niveles de yin.) Es de aquí de donde surge eso de "volver a la tierra" 4 veces al año, como modo de preparación para emprender un nuevo viaje, un nuevo desafío...al igual que ocurre con los chacras es necesario volver siempre al elemento tierra, el primero.
Con cada cambio de estación se producen alteraciones no solo en el clima sino también en nuestro organismo, cambios tanto psicológicos como orgánicos, durante las transiciones las emociones más frecuentes son las obsesiones y también la compasión, que puede degenerar en lástima...quizás por esto al salir del invierno para ingresar a la primavera es cuando, se dice, que se producen la mayor cantidad de brotes psicóticos ...parece una metáfora asociarlos con los brotes que en primavera presentan las plantas que despiertan del letargo de invierno.
Los órganos a tener en cuenta durante las transiciones son el estómago y el bazo-páncreas, el sentido de éstos períodos es el gusto con su sabor "el dulce", su elemento " tierra", que simboliza protección, resguardo, descanso...la expresión de esta quinta estación es el canto, por eso se dice que nada mejor que una canción para un estómago débil. El chacra correspondiente, entonces es el tercero...manipura chacra o joya lustrosa ( en mi otro blog http://www.patriciayoga.blogspot.com. me detengo a desarrollar ampliamente sobre la parte de chacras)
Para éstas épocas entonces debemos cuidar tanto nuestra digestión corporal como la espiritual, evitar excesos ( grasas, dulces...) y prestar atención a nuestro sistema inmunológico para pevenir los malestares que resultan de todo cambio, podemos reforzarlo prestando mayor atención a la dieta, incluyendo alimentos alcalinos y descartando los ácidos, cuidando la ingesta equilibrada de vitaminas A, B6,C,E y Calcio entre otros.
También es conveniente depurar el organismo para prepararlo para lo que vendrá, por lo tanto es indicado realizar ayunos o monodietas, tomar jugos de repollo, fuente rica en antioxidantes y anticanceroso, de papa, agua de cebada, agua de manzana y té de manzanilla.
En las clases prestaremos especial atención a las posturas de equilibrio que agregaremos a las propias de cada estación.